Los recientes fracasos de auditoría de UHY Hacker Young y Haysmacintyre, que han dado lugar a multas de la FRC, ponen de relieve la necesidad de contar con herramientas fiables de auditoría de banca abierta.
Es raro que pase una semana sin que se conozca otro sonado fracaso de auditoría. Pero muchos de los incumplimientos son involuntarios, causados por herramientas inadecuadas para completar las auditorías.
Ejemplos recientes de fallos de auditoría son las sanciones impuestas a UHY Hacker Young y su auditoría de Kenneth Kajang Rubber, y la auditoría de Haysmacintyre de Associated British Engineering. En este último caso, el FRC amonestó al socio auditor y a la empresa y les impuso una multa de 17.500 y 125.000 libras, respectivamente.
Los posibles litigios pueden evitarse aplicando herramientas de banca abierta para superar muchos de los fallos comunes asociados.
Esta tecnología es relativamente incipiente, pero su adopción por parte de los auditores contribuirá a mejorar la imagen de la profesión gracias a un menor número de fracasos, reducirá el coste de la actividad empresarial y redundará en auditorías de mayor calidad.
El fracaso de una auditoría es perjudicial en muchos sentidos
El fracaso de una auditoría puede tener consecuencias negativas para las empresas de varias maneras. La cobertura desfavorable de la prensa nacional y especializada dificulta a las empresas asociadas con el fracaso la retención de clientes, la captación de nuevos clientes y la atracción de personal.
Entre las Cuatro Grandes, los casos de litigios de auditoría suelen aparecer en las noticias nacionales debido a que las empresas auditadas son muy conocidas, líderes del sector o nombres muy conocidos del FTSE 100 o el FTSE 250.
La acuciante necesidad de mejorar las auditorías se pone de manifiesto en el hecho de que un tercio de las auditorías del FTSE 350 inspeccionadas el año pasado requerían mejoras.
La auditoría es increíblemente lucrativa para las grandes empresas, ya que a menudo representa la mayor parte de los ingresos repartidos entre las distintas líneas de servicio.
Si no se consigue retener a los clientes de auditoría de alto perfil, las empresas pierden ingresos en los años inminentes y futuros, y el fracaso también dificulta la captación de nuevos clientes.
Los fallos no suelen ser deliberados
Muchas de las infracciones asociadas a casos de la FRC no suelen ser intencionadas, sino que se deben a que los auditores no tienen acceso a las herramientas y recursos adecuados para analizar los enormes conjuntos de datos que producen las empresas modernas.
El FRC describió los incumplimientos de la auditoría de Haysmacintyre Associated British Engineering como no "intencionados, deshonestos, deliberados o imprudentes".
Esto debe ser doblemente frustrante para las empresas de auditoría, ya que la FRC señala que Haysmacintrye fue proactiva al emprender un "programa de medidas correctoras diseñado para abordar las deficiencias en el trabajo de auditoría".
Si las empresas de auditoría muestran voluntad de rectificar y no repetir errores, hay que dotarlas de mejores herramientas para hacer su trabajo.
Las herramientas de auditoría de banca abierta pueden superar muchos fallos de auditoría
Muchos de los fallos asociados a la auditoría de Haysmacintrye's Associated British Engineering podrían haberse evitado utilizando herramientas de auditoría de banca abierta.
En concreto, los incumplimientos se referían al inventario, la comprobación de asientos contables, el reconocimiento de ingresos y el cobro de deudas, el régimen de pensiones de prestaciones definidas, la empresa en funcionamiento y la revisión y supervisión de la auditoría. De estas seis áreas, las herramientas de auditoría de banca abierta habrían reducido los riesgos asociados al reconocimiento de ingresos, el cobro de deudas, la empresa en funcionamiento y la revisión general.
La tecnología de banca abierta permite a las empresas acceder a un conjunto completo de datos de transacciones bancarias relacionadas tanto con el periodo auditado como con las transacciones posteriores al cierre del ejercicio hasta el día de hoy.
Esto puede utilizarse para evaluar rápida y fácilmente si los deudores pendientes han sido pagados después del cierre del ejercicio, respaldar el principio de empresa en funcionamiento con una visión futura de las entradas y salidas de efectivo y también como medio para detectar posibles fraudes a partir de la identificación de valores atípicos y grandes transacciones únicas.
La adopción de la banca abierta mejorará la calidad de las auditorías y reforzará la profesión
Además de reducir la probabilidad de fallos en la auditoría, la utilización por parte de las empresas de soluciones de banca abierta también mejorará la calidad de la auditoría y permitirá a los auditores desempeñar sus funciones con mayor eficacia.
El análisis de un conjunto digital completo de transacciones bancarias ofrece a los auditores la posibilidad de comprobar el 100% de las transacciones en lugar de un enfoque de muestreo. Esto permitirá a los auditores comprobar todas las transacciones en lugar de sólo aquellas que superen el umbral de materialidad o que se seleccionen aleatoriamente en las muestras.
Esto mejorará la calidad de las auditorías y ayudará a gestionar la brecha de expectativas, definida como la diferencia entre la percepción pública del papel de un auditor y las responsabilidades legales de una auditoría. Además, contribuirá a restablecer la confianza en la profesión en un momento en que se han producido numerosas peticiones de reforma.
Para fomentar la banca abierta en las auditorías, debe haber más conciencia de cómo las herramientas relacionadas pueden ayudar a resolver muchos de los problemas asociados al fracaso de las auditorías.
Una forma eficaz de hacerlo podría ser que las empresas de auditoría demostraran que han aprendido de las sanciones mostrando al FRC (y al regulador posterior AGRA) su compromiso de corregir sus prácticas adoptando la banca abierta en los procedimientos de auditoría existentes.